martes, 21 de septiembre de 2010

Amapola del 66

Después de llover, bañaron las aves
su cansancio de ayer
sociedad de caras robadas te desprenden la piel.

Siembra poesía de sueños de ayer,
que trasciende al ser,
viejo cristal atrasando mi viaje,
no decide al fin.

No es redención, es reedición.
Ponte de pie, hombre ilusión.

Siguen las lluvias de un no ancestral
pero el tiempo es hoy.
Trenes de mimbre, del sueño el rock,
de esa ingenuidad.

Todo está vivo a pesar del dolor.
Si me sonreís, rios de cuerdas que vienen de vos,
justo a mi corazón.

No es redención, es reedición.
Ponte de pie, hombre ilusión.

Después de tanto andar, caí en mí.
Un universo esperándome.
No hay fantasmas ni desesperación,
ahora sé que estás ahí.

Amapola del '66,
¿en qué cuerpo estás hoy?
Un alma viaja al sol, al sol.

Sitio Oficial de Divididos


Presentación del disco Amapola del 66 en el estadio Luna Park el 02/06/2010

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lunes, 27 de abril de 2009

América Latina: una nueva conquista de la blogosfera


La palabra blog, resulta cada vez menos desconocida. Hoy en día se puede decir que la cultura de la blogosfera es parte del escenario social, en el que estas nuevas herramientas permiten compartir ideas, experiencias, proyectos, etc. Es un lugar más de encuentro, como lo son la escuela, el trabajo, el club, etc.

Recientes estudios se han ocupado de examinar cuál es la tendencia en el continente latinoamericano, respecto del uso de los blogs. Argentina, Brasil, México y
Venezuela, son los países referentes.
Por ejemplo, Brasil y Argentina llevan la delantera en términos de uso de Internet per cápita. Y Argentina tiene la mayor proporción de suscriptores de banda ancha.

Por esta razón, y debido a que existen tantas herramientas de fácil acceso a su disposición, no es una sorpresa que los usuarios de Internet en América Latina hayan ingresado rápidamente a la blogósfera.
Los programas para blogs más utilizados en América Latina son Blogger.com y WordPress.

Las principales temáticas que llevan los usuarios latinoamericanos a escribir, son la tecnología, la política y las noticias. Los siguen en orden los blogs de deporte. Los temas monetarios, la economía y los medios de comunicación vienen más atrás y casi la misma cantidad se dedican al humor.
El panorama en Estados Unidos es diferente, ya que aparte de los blogs personales, los blogs políticos son los más comunes. Los de entretenimiento y deportes son superados ligeramente por blogs de noticias generales, negocios y tecnología.

En el caso de Argentina, la mitad de los blogs clasificados en los primeros lugares son personales. Un tercio de los autores escribe sobre temas tecnológicos.
El año pasado, casi uno de cada dos argentinos gozaron de acceso a Internet. A razón de 16 millones de personas de una población de 40 millones, el triple de los que escuchan radio. Y ocupan el segundo lugar, sólo detrás de la televisión.
En Brasil, los temas políticos, tecnológicos y deportivos representan los primeros puestos. Otro estudio reveló que uno de cada 10 estaba explícitamente diseñado con contenidos humorísticos.
Existe una creencia de que los blogs son el vínculo más débil dentro del fenómeno de Web 2.0, pero el crecimiento continuo y acelerado indica que esta moda no terminará pronto. Y en la medida que más usuarios de Internet en América Latina adopten esta nueva oportunidad de expresarse, el fenómeno de la bologosfera mantendrá su desarrollo con la misma tendencia progresiva que viene demostrando.



miércoles, 22 de abril de 2009

Sociedad de la Informacion: ¿De qué se trata?


A los grandes términos como Sociedad de la Información, aquel universo que parece tan abstracto, cuesta darle una definición que logre explicar concretamente de qué se trata (por eso las hay en cantidades). Debería ser algo menos complejo, ya que sin tomar conciencia se vive inmerso en ella. Y se supone que nadie mejor para explicarla que su propio creador: el hombre. Pero aún así, a veces parece superarlo.

En toda generación se supo incorporar y hacer uso de las nuevas tecnologías, por eso hoy, sólo nos diferencia de nuestros antepasados, la velocidad con que advienen la incorporación de esos elementos y aún más, la velocidad y facilidad con la que logramos adaptarnos a ellos. Y más luego, la vida parece impensada careciéndolos.

La Sociedad de la Información es producto de la búsqueda del hombre por achicar las brechas. Tal vez con diversos fines, desde los económicos hasta los culturales, pero siempre queriendo estar “conectado” con el resto del mundo, hasta ese momento, desconocido y lejano.

Uno de los principales componentes de la Sociedad de la Información, es la enorme cantidad de datos e información inagotable que conforma el escenario contemporáneo. Todo está a nuestro alcance y los límites de acceso cada vez son más imperceptibles.
Los medios de comunicación son otro elemento que propicia información y crea espacios de interacción social, en donde se produce un intercambio constante de “ideas”. Entonces, las barreras geográficas se diluyen, la velocidad de intercambio de mensajes de todo tipo es insuperable. Nada parece inalcanzable: desde cualquier punto del mundo hacia su opuesto, la conexión se hace posible.

La Sociedad de la Información, como todo lo que el ser humano produce, tiene sus aspectos positivos y aquellos que no lo son tanto. Alguna vez se habrá pensado en el aprovechamiento de este intercambio fluido y veloz entre diferentes naciones, con fines tales como la educación. Pero la propia naturaleza, hace que existan partes dominantes y partes dominadas.
Por lo cual no debe descartarse el oportunismo de quienes tienen “el poder de influir en el resto del mundo”, para conducir ese hacia intereses menos solidarios. Además, esto mismo puede acentuar aún más las desigualdades entre las naciones, al contrario de difuminarlas. Sin duda alguna, la idea de “el resto del mundo”, ha cambiado desde los siglos pasados hasta la actualidad.

Seguramente ya nada es tan lejano ni tan ajeno y la humanidad se ha puesto el traje de Globalización sin poner resistencia. Habrá que confiar en la propia capacidad de la especie para aprovechar los beneficios que ofrece, y no llegar en algunos años, a lamentarse por haberlo echado a perder.

Fuentes: